domingo

LOS LABIOS COMO ESPADAS

Aquel Otoño
se quedaron aquí las golondrinas,
aquel Otoño
no se hicieron las hojas amarillas,
del mismo modo
renacieron por fin las esperanzas
aquel Otoño,
los labios como metas, como espadas.

Aquel Otoño
no se vistió de pardo la ladera
como si todo
anunciase una nueva Primavera;
aquel Otoño
la nieve que cayó sobre las sienes
se fue hasta el fondo
y se fundió en el lago del presente.

Aquel Otoño
repicaron campanas generosas,
como si otros
recordasen el ruido de las olas,
aquel Otoño
la calma se instaló en mi pensamiento
y poco a poco
resonaron las risas y sus ecos.

Volvió la vida
a mostrar otras cosas que reveses,
que las temidas
circunstancias adversas y estrecheces,
se abrió una rosa
en medio de un jardín deshabitado
y una imperiosa
urgencia de romper con el pasado.

Aquel Otoño,
aquel Otoño pasó y llegó el Invierno
y con su soplo
volví a descender a los infiernos...
aquel Otoño
pasó tan de repente que ahora pienso
si fue un Otoño
u otra noche soñando el mismo sueño

No hay comentarios:

Publicar un comentario