CAMINO DE SAN PEDRO

El Sol fue rompiendo nubes
por el camino
que va a San Pedro,
y en un borde del sendero
te dije un día:
"Marga, te quiero",
y en un borde del sendero
te dije un día:
"Marga, te quiero".

Tus manos fueron mis manos,
tu aliento mío,
el aire nuestro,
cuando en medio del silencio
te di en el río
mi primer beso,
cuando en medio del silencio
te di en el río
mi primer beso.

No volverá
aquel verano del setenta y dos,
porque nosotros no somos igual,
nos ha cambiado el tiempo a los dos;
no volverá
aquel principio ni aquel mismo adiós,
porque la vida nos hizo olvidar,
porque en el tiempo nos fuimos los dos.

El verde de aquellos pinos
y tú en el verde
junto a mi pecho,
y yo buscando en el suelo
algunas flores
para tu pelo...
y yo buscando en el suelo
algunas flores
para tu pelo.

El Sol fue rompiendo nubes
por el camino
que va a San Pedro,
y en un borde del sendero
te dije un día:
"Marga, te quiero",
y en un borde del sendero
te dije un día:
"Marga, te quiero".

No volverá
aquel verano del setenta y dos,
porque nosotros no somos igual,
nos ha cambiado el tiempo a los dos;
no volverá
aquel principio ni aquel mismo adiós,
porque la vida nos hizo olvidar,
porque en el tiempo nos fuimos los dos...
no volverá
aquel principio ni aquel mismo adiós,
porque la vida nos hizo olvidar,
porque en el tiempo nos fuimos los dos.

UN MUNDO PARA DOS

Te apartaré del mundo
para que no te manche,
te pediré el olvido
de todo lo que sabes,
te llevaré a mi casa
vendrás para quedarte.

Mi casa no es cuna aristocrática
ni es falsa, fingida o enigmática,
no hay bronce ni escudo en sus balcones
ni estúpido culto a los millones;
hay limpios cristales para que entre el Sol,
errantes verdades y ansiedad de amor,
silencios que esperan albergar tu voz:
un mundo pequeño sólo para dos.

Te inundaré de besos
hasta que te emborrache,
te contaré mis sueños
y borraré tu antes,
te llevaré a mi casa
vendrás para quedarte.

Mi casa no es cuna aristocrática
ni es falsa, fingida o enigmática,
no hay bronce ni escudo en sus balcones
ni estúpido culto a los millones;
hay limpios cristales para que entre el Sol,
errantes verdades y ansiedad de amor,
silencios que esperan albergar tu voz:
un mundo pequeño sólo para dos.

Mi casa no es cuna aristocrática
ni es falsa, fingida o enigmática,
no hay bronce ni escudo en sus balcones
ni estúpido culto a los millones;
hay limpios cristales para que entre el Sol,
errantes verdades y ansiedad de amor,
silencios que esperan albergar tu voz:
un mundo pequeño sólo para dos...
silencios que esperan albergar tu voz:
un mundo pequeño sólo para dos.

ESPÉRAME

Podrías ser tú,
así de lejos
bajo ese viejo
cielo azul...
tu forma de andar,
tu mismo pelo
bajo ese cielo
libre volar...

Podrías ser tú,
mas tú no serás,
tus ojos de luz
tus labios de paz,
y aunque no serás
no pierdo la fe
y vuelvo a gritar:
"¡amor, óyeme!"

Y espérame
en un claro del camino espérame,
en el fondo de tu vida
cuando ya te encuentres sola
desengañada y vencida...

Y espérame
en el fondo de tu vida espérame
y no tiembles, vida mía,
que aún nos queda la esperanza
de encontrarnos algún día.

Podrías ser tú,
cuando la tarde
es un alarde
de gris y azul,
tu mismo vestir
tu misma risa
como una brisa
del mes de Abril...

Podrías ser tú,
mas tú no serás,
tus ojos de luz
tus labios de paz,
y aunque no serás
no pierdo la fe
y vuelvo a gritar:
"¡amor, óyeme!"

Y espérame
en un claro del camino espérame,
en el fondo de tu vida
cuando ya te encuentres sola
desengañada y vencida...
Y espérame
en el fondo de tu vida espérame
y no tiembles, vida mía,
que aún nos queda la esperanza
de encontrarnos algún día.

EN UNA HABITACION, EN UNA CAMA

Déjame despeinarte los cabellos,
tu pelo reflejándose en la tarde
y surcarlo despacio con mis dedos
respirando el aroma que lo invade,
pero no en el rincón de un bar discreto
bajo la sensación de una mirada,
déjame despeinarte los cabellos
en una habitación, en una cama.

Déjame desgranarte los "te quiero"
uno a uno, a cuál más convencido,
llamarte por tu nombre y lo que siento
plasmarlo en un amor, un amor mío,
pero déjame hacerlo en el silencio
y no entre una nube de palabras,
déjame desgranarte los "te quiero"
en una habitación, en una cama.

Hoy sin falta
voy a verte
y a decirte
que te quiero
hoy sin falta
voy a hacerte
el amor quieras o no...
que me falta
que se pierde
esta vida
sin tenerte
hoy sin falta
voy a verte
para darte el corazón.

Déjame que te adore con un beso,
con un beso inmensamente largo
que comience rozando y suponiendo
y termine mordiendo y confirmando,
pero no intranquilo, con recelo,
sino pura emoción y pura brasa,
déjame que te adore con un beso
en una habitación, en una cama.

Déjame que conozca los caminos
que señalan el mapa de tu cuerpo,
que humedezca tu piel y tus sentidos,
que no deje un rincón sin recorrerlo...
déjame que se llene tu vacío
y que ardamos los dos la misma llama,
déjame ser feliz, cariño mío,
en una habitación, en una cama.

Hoy sin falta
voy a verte
y a decirte
que te quiero
hoy sin falta
voy a hacerte
el amor quieras o no...
que me falta
que se pierde
esta vida
sin tenerte
hoy sin falta
voy a verte
para darte el corazón...

hoy sin falta
voy a verte
y a decirte
que te quiero
hoy sin falta
voy a hacerte
el amor quieras o no...
que me falta
que se pierde
esta vida
sin tenerte
hoy sin falta
voy a verte
para darte el corazón.

14-F: ENAMORADOS

Sonríe el alma
cuando me miras,
cuando te miro,
sonríe el alma
cuando suspiras,
cuando suspiro...
y duele el alma
si en tu mirada
surge un temor...
que tu alegría
es mi alegría
y que tu pena
es mi dolor.

Tú y yo
tú y yo
enamorándonos
como dos niños,
tú y yo
tú y yo
enamorados
vivimos.

Sonríe el alma
cuando regresas
cuando regreso,
sonríe el alma
cuando me besas
cuando te beso,
y duele el alma
cuando la niebla
cubre el amor...
que tu alegría
es mi alegría
y que tu pena
es mi dolor.

Tú y yo
tú y yo
enamorándonos
como dos niños,
tú y yo
tú y yo
enamorados
vivimos.

Tú y yo
tú y yo
enamorándonos
como dos niños,
tú y yo
tú y yo
enamorados
vivimos.